domingo, 4 de agosto de 2013

OBRAS 83: PARTE I

Este concierto se promociono con bastante anticipación coincidiendo con la salida de la excelente recopilación "TODO PASTORAL".
El concierto del 30 de abril será un imposible de olvidar.
Desde muy temprano se formaron las colas en la puerta del estadio, se veían muchos jóvenes tratando de conseguir una entrada para poder ingresar,  y muchos no lo consiguieron.

La gran mayoría las había adquirido con anticipación.

Luego de una interminable espera, al fin se abrieron las puertas,  y después de pasar por los controles dispuestos, comenzaron a entrar.

Era impresionante el afiche de la tapa de TODO PASTORAL que había en la entrada del estadio, enorme e imponente.

Ya dentro del estadio, todos comenzaron a buscar ubicación.

A medida que llegaban a las butacas asignadas, personal del concierto les entregaba un afiche de la medida exacta de la tapa de un  Lp y la imagen era la de “TODO PASTORAL”. Al dorso de la misma se podían leer los nombres de los músicos y demás realizadores del recital, entre ellos el auspiciante, la conocida marca de ropa Fiorucci.

Luego de un tiempo considerable, parecía ser que todo estaba listo, pero PASTORAL  demoraba en aparecer, lo que llevo a la gente a cantar como en una cancha de futbol, para que saliera a escena, vitoreando su nombre.
Desde los cuatro costados del estadio se escuchaban canticos pidiendo que el dúo saliera.
Se podía palpar el entusiasmo que existía. La impaciencia se hizo más notoria aun,  cuando habiendo  pasado  ya treinta largos minutos,  las luces del estadio seguían encendidas. El clima se iba poniendo cada vez más pesado debido a la demora.
De repente,  el estadio queda completamente a oscuras y se comienza a escuchar una introducción de teclados hasta ese entonces, desconocida.
La ovación fue tremenda, aunque el público en general no entendía del todo lo que estaba ocurriendo. El estadio continuaba a oscuras y solo se podía ver en el escenario unas luces como si fueran linternas, moviéndose en distintas direcciones.
Para ese entonces ya se escuchaba la guitarra acústica dando comienzo a “ME DESPRENDO DE TU VIENTRE”, y a la gente ovacionando al dúo.
El público, apoyando a la banda, era parte del espectáculo.
Las luces generales seguían apagadas y solo se veían las pequeñas en el escenario, hasta que Alejandro De Michele comenzó a cantar y ahí se iluminó el estadio y se pudo apreciar que los músicos vestían overoles y cascos con linternas.
Una puesta en escena impensada para los que asistieron al concierto.
El tema fue interpretado con una marcada base rítmica, característica del nuevo PASTORAL.
El público canto en varios momentos el tema, impulsados por las señas de Alejandro invitándolo a hacerlo.
Un excelente puente musical introdujo el segundo movimiento de la suite “DE REGRESO A TUS ENTRAÑAS”, interpretado con una fuerza impresionante, donde se destacó el bajo de Gustavo Dones y la habilidad en guitarra eléctrica del músico invitado, Carlos García López. El final del tema arranco aplausos y gran ovación.
De Michele dio la bienvenida al público y continuaron con “SACA LAS BRUJAS”. Para luego seguir, tras la presentación de Miguel Ángel Erausquin, con una muy buena interpretación de “BABANY”.
Lo siguieron “SEXTO C” y “MUJER SILENCIO” para llegar a uno de los momentos más altos del recital con “LUSTRABOTAS” (acompañado por todo el estadio).
Una incomparable versión de “TRISTE Y ANTIGUA DAMA”, donde se destaco la armónica de Erausquin y la correctísima batería del Pato Loza.
Los diálogos con el público fueron una constante, lo cual daba la sensación, que más que un concierto, esto era una gran fiesta.
Se empezó a escuchar el inconfundible comienzo en piano de “PELEANDOSE”,  ejecutado a la perfección por Juan Del Barrio y De Michele empleo este tema,  para hacer participar al público, que lo canto en su totalidad.  Tanta importancia le dio Alejandro  a la participación del público, que por momentos para dirigirlo, dejaba cantando solo a Miguel Ángel.
Era realmente una fiesta al nivel de Pastoral.
Al término de este tema, una espesa cortina de humo se poso sobre el escenario y no dejaba ver absolutamente nada ...

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